El pasado martes 22 de enero entró en vigor la normativa que obliga a indicar el país de origen de los lácteos en el etiquetado.

Esta legislación regulará durante los próximos dos años la indicación obligatoria del origen de la leche utilizada como ingrediente en el etiquetado en los productos elaborados y comercializados en España.

Los consumidores podrán ver así en el etiquetado tanto el país de origen en el que la leche ha sido ordeñada, como el país donde ha sido transformada, facilitando así información para la decisión de compra.

El Real Decreto 1181/2018 del que hablamos afecta también a yogur, nata, lactosueros, mantequilla, quesos o requesón, entre otros productos lácteos.