El pasado viernes 2 de febrero, ALINAR participó en una reunión con la presidenta del Gobierno de Navarra María Chivite y las organizaciones agrarias referentes del sector agroalimentario de Navarra UCAN y UAGN, para plantearle la necesidad de desarrollar un plan estratégico para el sector que permita abordar las dificultades a las que se enfrenta.
Durante el encuentro se constató la importancia que tiene el sector agroalimentario en la economía y el empleo de Navarra. El sector primario y la industria agroalimentaria representan en torno al 14% del PIB industrial de Navarra, con un impacto económico de unos 4.500 millones de euros y genera aproximadamente 27.500 puestos de trabajo directos, mayoritariamente en el entorno rural, favoreciendo la cohesión territorial y la igualdad de oportunidades.
ALINAR también trasladó a la presidenta, que la industria agroalimentaria cuenta con empresas grandes, refrentes en sus actividades, pero que sin embargo la amplia mayoría de empresas del sector son medianas y pequeñas empresas y se pidió que se tenga en cuenta esta realidad a la hora de establecer la estrategia.
La reunión permitió trasladar los retos a los que se enfrenta el sector, y la necesidad de abordarlos a corto plazo a través de un plan estratégico que asegure la viabilidad del sector y garantice su viabilidad. Los principales retos expuestos fueron:
- Promover el empleo en el medio rural. El sector cuenta con serias dificultades para atraer personas de baja y alta cualificación. Esta situación está provocada por la paulatina despoblación del medio rural, la alta temporalidad y la falta de servicios, por lo que se pidieron medidas para luchar contra la despoblación.
- Falta de materia prima a causa del cambio climático y sus consecuencias. Inundaciones, heladas y sequía entre otros fenómenos, están reduciendo significativamente la cantidad de productos cultivados y por tanto la cantidad de materia prima de la que disponen las empresas de la industria agroalimentaria.
- Plantear el desarrollo de un Plan Hídrico. Se solicitó el desarrollo de la 2º fase del Canal de Navarra que permita cubrir las necesidades hídricas del futuro, desarrollar las infraestructuras necesarias y facilitar la ampliación de la superficie cultivada de productos agrícolas. Esta superficie se ha visto menguada de manera muy significativa en los últimos años por la falta de personal y de recursos.
- Dificultades con la fiscalidad de las empresas. Las empresas de Navarra cuentan con un régimen fiscal que no les permite competir con otras zonas de España, debido a la alta carga impositiva a la que se enfrentan.
- Simplificar la carga legislativa y normativa de las empresas. La complejidad establecida por los cambios legales en los últimos años, están suponiendo una carga burocrática insostenible, especialmente para las pequeñas y medianas empresas.
- Promover el I+D en la industria agroalimentaria. Aspecto fundamental para que el sector pueda enfrentarse a un mercado nacional e internacional enormemente competitivo.